Para chulo chulo...mi pirulo!

Continúa el culebrón Hermann Terschscxhs (en adelante Mr. T, que me cuesta mucho el apellido). Ayer informaba interviú de que el pobre periodista (hoy estoy de buenas y hago cumplidos), no fue agredido por "moros, ni gente del cine, ni antifascistas, ni miembros de la SGAE", ni Zapatero ni Wyoming, añado yo. Las sospechas se ciernen sobre Emilio Aragón. No, aunque vistos los tiros al aire, tampoco me extrañaría. Al parecer podría ser un chulo el agresor. No un chulo que baile el chotis, sino uno de estos de toda la vida que te encuentras en Montera con cara de paisaje.

Mr T., según declaran testículos de la escena, pudo haber agarrado a una señorita de vida alegre (nunca he entendido esta forma de llamar a esta profesión, porque yo creo que hacértelo con gente como Mr T. no debe ser precisamente divertido y menos a esas horas en las que seguramente le cante el pozo a DYC), lo cuál debió mosquear al chulo.

Hay varias teorías, entre las que se encuentra la de que confundiera a la señorita con su compañera de desinformativo.

El caso es que hubiera sido mejor que Mr T. consumara aquella noche, u otra cualquiera y desde este humilde blog, queridos desahogaos, hago un llamamiento para que le hagan descuento, porque lo que quizá le haga falta a este señor es echar un buen polvo.

P.D: ¿Qué opinará Currichi Valenzuela de estas aventuras nocturnas? ¿Seguirá demasiado ocupada coleccionando fotos de belenes?